Entre el ruido y la indigencia
qué más da que muera
el que camina y siente.
Aquel, que llevaba
en sus puños
el peso de la palabra,
el que interpretaba los signos
desleídos de los sueños.
El hombre que sale a la calle,
bajo su paraguas,
no lo conoce, ni lo presiente,
y lleva su nombre escrito
en las arrugas del rostro,
en sus manos ocultas
en los bolsillos.
Qué mas da que llueva,
que no pare de llover nunca,
que chorreen los diarios
tinta de calamar.
El hambre te arrastra por pasos húmedos
y no hay sol donde refugiarse.
Aquel, que unía las sinalefas
de los silencios inoportunos,
pedía a gritos:
hojas
de papel en blanco,
manos
con dedos afilados
como lápices,
bonos
para el transporte urbano.
Qué más da que ahora
se dediquen faustos y gloria,
para alivio
de rasuradas conciencias,
si ya está muerto
el poeta Arturo Maccanti,
sobre esta arena nuestra,
bajo este azul
que mana interminable.
M.A.N.H. (25/12/14)
Al fondo del bosque, la humedad se hace presencia, aullido, sobrecoge y alimenta.
domingo, 28 de diciembre de 2014
sábado, 27 de diciembre de 2014
HAIKUS DE DICIEMBRE (y 2)
Cuando mi hijo
tenga la edad que tengo,
seré mi padre.
........
Lenta transcurre
la tarde del domingo.
Sopor y lluvia.
..........
Muere un anciano.
La memoria se pierde.
Morimos todos.
..........
Bajo la lluvia
llamo insistentemente:
Perdí tu aleteo.
...........
Vuelas, gaviota,
lejos de mi alcance.
¡Cómo te añoro!
M.A.N.H. (15/12/14)
tenga la edad que tengo,
seré mi padre.
........
Lenta transcurre
la tarde del domingo.
Sopor y lluvia.
..........
Muere un anciano.
La memoria se pierde.
Morimos todos.
..........
Bajo la lluvia
llamo insistentemente:
Perdí tu aleteo.
...........
Vuelas, gaviota,
lejos de mi alcance.
¡Cómo te añoro!
M.A.N.H. (15/12/14)
jueves, 18 de diciembre de 2014
HAIKUS DE DICIEMBRE (1)
Cuatro paredes
atan el techo a lo alto.
¿Cómo escapar?
.............
Puertas disfrazan
la elección y el ocaso.
Incertidumbres.
.............
Por qué las puertas.
Para qué las ventanas.
... Y no asomarse.
.............
A lo lejos veo
el niño que he sido,
que se ha muerto.
.............
Nunca fui niño
como tú eres mujer.
¡Quién lo diría!
M.A.N.H. (14/12/14)
atan el techo a lo alto.
¿Cómo escapar?
.............
Puertas disfrazan
la elección y el ocaso.
Incertidumbres.
.............
Por qué las puertas.
Para qué las ventanas.
... Y no asomarse.
.............
A lo lejos veo
el niño que he sido,
que se ha muerto.
.............
Nunca fui niño
como tú eres mujer.
¡Quién lo diría!
M.A.N.H. (14/12/14)
sábado, 13 de diciembre de 2014
UNA PIEDRA
Lluvia y viento socavan
la forma
con el cincel de lo inaudito.
Todo queda reflejado
en la estadística.
El tiempo y su maquinaria
dibujan el espacio
de la geografía.
La bruma - por fin -,
a retazos
muestra su imagen:
Soledad
de una piedra
empeñada
en mantenerse erguida.
M.A.N.H. (08/12/14)
la forma
con el cincel de lo inaudito.
Todo queda reflejado
en la estadística.
El tiempo y su maquinaria
dibujan el espacio
de la geografía.
La bruma - por fin -,
a retazos
muestra su imagen:
Soledad
de una piedra
empeñada
en mantenerse erguida.
M.A.N.H. (08/12/14)
miércoles, 10 de diciembre de 2014
HAIKUS DE NOVIEMBRE
Transcurres vida
por un hilo casual.
Sopla el viento.
……..
No hay salidas,
más allá de la puerta,
sin presentirlas.
……..
Bombilla halógena
que disfraza la luz
entre las sombras.
……..
En el asfalto,
hombres solos conducen.
Yo entre ellos.
……..
Amanecida,
suena el despertador.
El sueño escapa.
……..
En el taller
la espera se prolonga.
Ruido y trabajo.
……..
Para comer,
matamos al hambriento
que llevamos dentro.
M.A.N.H. (20/11/14)
por un hilo casual.
Sopla el viento.
……..
No hay salidas,
más allá de la puerta,
sin presentirlas.
……..
Bombilla halógena
que disfraza la luz
entre las sombras.
……..
En el asfalto,
hombres solos conducen.
Yo entre ellos.
……..
Amanecida,
suena el despertador.
El sueño escapa.
……..
En el taller
la espera se prolonga.
Ruido y trabajo.
……..
Para comer,
matamos al hambriento
que llevamos dentro.
M.A.N.H. (20/11/14)
sábado, 6 de diciembre de 2014
VIVEN MUEREN
Regresan cansados
del vacío de la ira
que,
el desconcierto,
les deja
sujeto a sus sombras.
Es verdad,
arrastran pasos
que a nada conducen.
- Cegados tienen
los caminos -
Tampoco les vale
el olvido
como atajo.
Lloran sin lágrimas.
Son ignorados.
La lluvia
les abate
un ruinoso paraguas.
Adelante siguen.
Alegres alzan
el calor de la palabra.
Ignoran
tropiezos,
soledades,
malquerencias,
con tal de continuar.
Es verdad
que viven mueren.
¿Cómo iba a ser distinto?
M.A.N.H. (30/11/14)
del vacío de la ira
que,
el desconcierto,
les deja
sujeto a sus sombras.
Es verdad,
arrastran pasos
que a nada conducen.
- Cegados tienen
los caminos -
Tampoco les vale
el olvido
como atajo.
Lloran sin lágrimas.
Son ignorados.
La lluvia
les abate
un ruinoso paraguas.
Adelante siguen.
Alegres alzan
el calor de la palabra.
Ignoran
tropiezos,
soledades,
malquerencias,
con tal de continuar.
Es verdad
que viven mueren.
¿Cómo iba a ser distinto?
M.A.N.H. (30/11/14)
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